LA GORDURA EN EL ENCIERRO

 

Diana Marcela Ángel Sánchez

Estudiante del grado 905

 

La obesidad es un caso que en muchos hogares ha aumentado de forma drástica por la facilidad de tomar clases o trabajar desde casa, por la poca actividad física que realizamos a diario es común que muchas personas en los hogares aumenten de peso.

 

En mi hogar teníamos una rutina antes de la pandemia, yo en muchas ocasiones madrugaba debido a las clases a las que debía presentarme, tenía un horario para desayunar, almorzar y cenar. Debido a esto y la actividad física que realizaba a diario, tenía una condición física notable y bastante buena, sin embargo cuando empezó la pandemia muchos de los hábitos que tenía ya no existen, en estos 6 meses que llevamos de cuarentena me he vuelto un poco más sedentaria en muchas cosas que realizo, ya que no salgo de mi hogar y no corro o camino como lo hacía antes, siendo de esta manera un aumento considerable de grasa en mi cuerpo, no resisto los mismos kilómetros que corría antes o que lograba caminar, ahora lo intento hacer y me agito mucho más rápido haciendo notable el cansancio contínuo y la poca resistencia de mis pulmones, este y otros problemas se presentan constantemente en muchos hogares y debido a la mala alimentación que se presenta y que provoca el aumento de grasa hasta el punto de la obesidad.

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Mi rutina después de la cuarentena es que mis comidas están muy dispersas en horarios que no deberían ser, desayuno a la 1:00 pm almuerzo a las 6:00 pm y ceno a las 9:00 pm. Con este desequilibrio alimenticio, presento el aumento de grasa en mi cuerpo.